Tramo 1. Soto-Vegabaño
Desde Soto de Sajambre la ruta se inicia por el camino Viejo que lleva a Vegabaño. Durante el primer kilómetro, la senda discurre junto al río Agüera para después girar a la derecha y adentrarse en el bosque. A partir de este punto gana altura con rapidez, siempre por un camino ancho y bien marcado que, con el paso de los años, ha quedado perfectamente integrado en el hayedo.
Este camino desemboca en un pista forestal por la que continuará la ruta. Deja atrás la barrera que limita el acceso a Vegabaño a los vehículos que no estén autorizados y, tras apenas unos cientos de metros en ligera pendiente ascendente, se llega a Abaño, una amplia y despejada vega rodeada de bosques, que los pobladores neolíticos de estas montañas eligieron como lugar para su último descanso.
¡Sin duda un lugar privilegiado!
Se trata de un entorno particularmente hermoso, sobre todo en otoño cuando las hojas tornan su color y el bosque se tinta de mil matices. El contraste con la imponente mole de caliza gris de los Picos de Europa resulta entonces especialmente atractivo.
El entorno de Vegabaño reúne algunos de los mejores bosques eurosiberianos de la península Ibérica, tanto por el desarrollo y madurez de su estrato arbóreo, como por la enorme diversidad que albergan.
En Vegabaño siempre existió una majada con cabañas de pequeñas dimensiones donde se guarecían los pastores mientras atendían al ganado. Aunque ahora son de teja, hasta hace apenas unos lustros, las cubiertas de estas cabañas estaban preparadas con troncos ahuecados de roble, dispuestos de forma alterna, lo que las hacía casi impermeables.
Tramo 2. Vegabaño-La Cotorra de Escobaño
Tras disfrutar de la imponente panorámica que se ofrece desde Vegabaño, la ruta continúa bordeando la vega por su lado norte, en dirección a la collada de Barcinera y a Carombo.
Tras pasar un cercado para el ganado, se adentra en el hayedo que, favorecido por la altitud y la orientación, puebla gran parte estas laderas. Algunos hitos de piedra marcan el paraje concreto donde será necesario abandonar el camino de Carombo para iniciar la ascensión a La Cotorra.
En este último tramo, el sendero desaparece y serán experiencia e intuición las que guíen los pasos hasta la cima, en busca siempre del punto más elevado. La cumbre rocosa se encuentra despejada de vegetación y constituye un excelente mirador sobre Vegabaño, Carombo, la Jocica y también de las cumbres que dominan la cuenca del Dobra, como Peña Beza, el Canto Cabronero o el Pico Jario y, por supuesto, las impresionantes alturas del macizo occidental de los Picos.
Discretamente colocada en la cumbre se encuentra una estación meteorológica que sirve para registrar datos sobre las condiciones meteorológicas en estas montañas.
El regreso a Soto de Sajambre puede hacerse por el mismo camino viejo empleado en la subida, o bien por la pista forestal que, además, resulta idónea para bici de montaña, para una travesía a caballo o para el tránsito de vehículos 4×4, siempre que estén autorizados.