Las vistas desde el mirador del Tombo son todo un espectáculo. La Aguja Mª Carmen y a la Pica del Castro en primer término. Al fondo el Macizo Central
De Posada de Valdeón a Caín
La ruta desde Posada de Valdeón a Caín transita a tramos por pista y en otros por la carretera que comunica ambas poblaciones. El recorrido de unos 9 Km. en descenso salva 480 m. de desnivel y puede llevar de 2 a 3 horas sólo ida.
Tras salir de Posada de Valdeón y a la altura de Cordiñanes se alcanza el Mirador del Tombo, las vistas desde allí son formidables, se aprecia la entidad del territorio de Picos de Europa.
Enfrente del mirador es posible observar a los escaladores evolucionar en la Vía Ferrata de Valdeón, instalación deportiva que discurre por la crestería situada en primer término y asciende a la esbelta aguja Mª Carmen y a la Pica del Castro.
El Chorco de los Lobos y La Ermita de Corona
De camino a Caín se puede visitar El Chorco de los Lobos, antigua construcción utilizada por los pastores de Picos para capturar a los lobos que hostigaban el ganado.
Frente al Chorco de los Lobos está la pradería e invernales de Corona, presidida por la ermita a la que da nombre y enclave en el que cuenta la tradición fue coronado el Rey Don Pelayo.
Túneles escavados en la roca en la entrada de la Garganta del Cares desde Caín
La Ruta desde Caín a Poncebos
A partir de Caín y hasta Poncebos sorprende la fabulosa obra de ingeniería del canal a lo largo de toda la garganta, así como los encinares sobre las rocas en el desfiladero.
Tras atravesar los túneles húmedos y ganados a la roca que dan entrada a la Garganta del Cares desde Caín, se llega a la majada de Casielles primero y al puente de los Rebecos después.
Esta construcción junto con la del puente Bolín situado algo más adelante cruzan la profunda y entallada hoz del río Cares, convirtiéndolos en uno de los puntos más impresionantes de la Ruta del Cares. A buen seguro sentirás un hormigueo si diriges la vista hacia el vacío.
Siguiendo el sendero se llega a Culiembro. La antigua caseta para los guardas de la compañía eléctrica, que todavía existe, será un buen lugar para tomar un respiro y reponer fuerzas.
Culiembro
Culiembro será el punto de inflexión para aquellos que estén realizando la opción de ida y vuelta desde Caín.
Continuar por la ruta un poco más será sin duda una tentación dado el espectáculo paisajístico, pero conviene tener en cuenta la preparación física y fuerzas que uno tenga, recuerda que el final de la ruta está al llegar al coche y si lo has dejado en Caín desde Culiembro está a 6 Km.
Hacia Poncebos
Siguiendo en dirección a Poncebos se alcanza un poco más adelante la Portiella, limite de las provincias de León y Asturias.
Tras alcanzar Armaduras, una zona de picachos y precipicios con el río de fondo se llega al Murallón de Amuesa. Sus paredes con más de 1000 m. de caída sobrecogen a los caminantes de la ruta.
Una pequeña subida será el remate final de la ruta antes de iniciar el suave descenso hacia la localidad de Poncebos.
El recorrido entre Caín y Poncebos es de unos 11 Km. en llano con un desnivel a favor en el último tramo de unos 230 m. y puede llevar de 3 a 4 horas sólo ida.